La terapia de luz roja se ha convertido en un verdadero cambio de juego en el mundo de la belleza, ya que es una forma de tratamiento que actúa sobre la piel sin ninguna invasión. Hay una serie de parámetros a tener en cuenta al comprar un dispositivo de belleza de terapia de luz roja, como la longitud de onda, el área que necesita tratamiento y la portabilidad del dispositivo. Cualquier dispositivo que emita longitudes de onda de 600-650nm o 800-850nm es bueno para la piel, ya que tales longitudes de onda penetran profundamente y promueven la curación y reparación de células dañadas. Además, usar un dispositivo que se ajuste a tu estilo de vida – por ejemplo, un dispositivo de mano para tratamiento localizado o un panel de cuerpo completo para sesiones más grandes – mejorará tu experiencia y resultados generales.